J. A. Regodón, 2005 |
Algunos impactos globales |
CTMA |
Se consideran impactos globales
los que afectan a una parte importante de la Tierra. Entre ellos se encuentran
muchos de los ya vistos en el curso: desertización y pérdida de suelos,
contaminación atmosférica, cambio climático, lluvia ácida, destrucción de
la capa de ozono,.... Pero aun nos quedan algunos por ver, como son: deforestación,
pérdida de biodiversidad, alteración de las costas y sobreexplotación de los
acuíferos.
1.
Deforestación:
a)
Por deforestación entendemos la pérdida de bosques. Las consecuencias
de esta pérdida son:
-
Aumento de la erosión.
- Menor
infiltración del agua y consecuentemente menor recarga de aguas subterráneas y
aumento de las inundaciones en las zonas afectadas.
-
Pérdida de especies útiles para obtener sustancias, medicamentos, ....
- Aumento de la concentración de CO2 al destruirse los
árboles y disminuir la fotosíntesis.
b)
La deforestación se produce por muchas causas, entre ellas:
- La sobreexplotación de
los bosques (para obtener maderas nobles, combustibles, papel u otros recursos)
sin permitir su regeneración.
- La agricultura (ej:
anualmente se destruye en el Amazonas una superficie superior a Extremadura para
obtener campos de cultivos, que por cierto, son mucho más pobres de lo que se
creía).
- Obtención de pastos para
el ganado. En España y Extremadura, en muchas ocasiones, se han clareado los
bosques (dando lugar a muchas dehesas) para
permitir el desarrollo de herbáceas que alimentasen al ganado.
- Los incendios forestales: Es
una de las principales causas de desaparición de los bosques. Todos los años
se pierden en el mundo millones de hectáreas por este motivo, lo que supone una
de las peores agresiones que pueden sufrir (la destrucción es casi total, tanto
de la vegetación como de la fauna).
Muchas plantas están preparadas
para resistir al fuego, o incluso sacan beneficios de él, especialmente las de
aquellos lugares propensos al mismo (ej: mayoría del territorio español). Así,
las encinas y alcornoques permiten el paso del fuego por sus copas
pero sus troncos no arden y permanecen protegidos por sus fuertes cortezas, de
forma que pasado el fuego rebrotan con cierta facilidad; la semilla de jara
germina normalmente muy mal, sin embargo, tras un incendio, las semillas
parcialmente quemadas germinan pronto (así será una de las primeras especies
que invadan la zona); algo similar ocurre con los pinos, que incluso
producen sustancias para arder bien, de manera que al crecer más rápido (que
por ejemplo las encinas) y germinar bien sus semillas, tras los incendios,
dominarán la zona.
Las causas por las que aparecen
incendios son variadas. En principio se distinguen entre incendios provocados
por la acción humana e incendios naturales, provocados por rayos,
combustión espontánea de humus y de sus gases o, más raramente, erupciones
volcánicas. Pero también somos indirectamente responsables de
muchos incendios naturales debido a las alteraciones a las que hemos sometido a
los bosques. Entre las razones por las que provocamos incendios, intencionados o
no, están:
- El clareo del matorral
del sotobosque, para facilitar la entrada de maquinaria con la que extraer
recursos del mismo.
- La destrucción total del
bosque y su sustitución por campos de cultivo o pastos que arden mejor.
- El abandono del medio rural, provocado por la urbanización
creciente a lo largo de este siglo. El abandono de tareas como el pastoreo y la
recogida de leña provocan una acumulación de restos vegetales bajo los árboles,
una materia fácilmente combustible.
- Las imprudencias, como la quema de rastrojos o las hogueras mal
apagadas, y la contaminación (vidrios rotos que actúan de lentes, latas que
dan reflejos, etc.).
- La apertura de caminos
forestales y la popularización del automóvil añaden una presión a los
bosques, al facilitar la visita de personas, muchas de ellas sin una verdadera
conciencia de las consecuencias de sus acciones.
- Los errores en la repoblación,
plantando una sola especie de crecimiento rápido (ej; pinos, eucaliptos) en
detrimento de un bosque más variado y, por tanto, más difícil de arder en su
totalidad.
- El "stress hídrico",
provocado por una sobreexplotación del agua y las alteraciones de la escorrentía
superficial.
- El lucro económico, que
busca destruir un paraje natural para obtener beneficios como la recalificación
del terreno, de entorno a proteger a terreno urbanizable (ej: Sierra de la Mosca
en Cáceres), o de la venta de una madera quemada, mucho menos valiosa que la
madera sin arder pero más que la madera intocable de una zona protegida (se
sospecha que esto ocurre todo los veranos en Galicia).
Las soluciones al problema
de los incendios son complejas, pero algunas serían:
- Adecuada política de
repoblación forestal, que busque la regeneración a medio plazo del bosque,
mezclando varias especies, y que no busque la obtención de beneficios económicos.
- Volver a aplicar prácticas
agrarias ahora abandonadas como el pastoreo del sotobosque o la recogida de
leña, eso sí, cuidando de que no se conviertan en agresiones contra el
entorno.
- Creación de cortafuegos,
depósitos de agua en el monte, vigilancia extrema y medios para sofocar
incendios (camiones autobomba, helicópteros e hidroaviones, brigadas
forestales,...)
- Una legislación
adecuada, que frene a los infractores y que impida la especulación económica
con el bosque quemado y el terreno donde se asentaba.
- Aumentar la conciencia ecológica
con campañas publicitarias que hagan hincapié la necesidad de conservar los
bosques, no ensuciándolos, no tirando colillas desde los automóviles, etc.
2.
Las alteraciones de la biodiversidad:
Las modificaciones de la
biodiversidad se producen como consecuencia de la alteración de la biocenosis
que habita un medio. Este tipo de impactos se pueden producir directamente, añadiendo
o quitando especies de un ecosistema, o indirectamente, al modificar algunas
condiciones que dificultan el normal desarrollo de determinadas especies o que
favorecen el desarrollo de otras.
Como en casos anteriores, las
causas que provocan estas alteraciones son muy variadas:
1.- Sobreexplotación de una
especie. Ej: caza o pesca excesiva, recogida de flora silvestre.
2.- Comercio internacional de
especies, que busca exclusivamente fines lucrativos distintos de la
alimentación. Ej: piel de los cocodrilos, marfil, cuernos de rinoceronte,
huesos de tigre, etc.
3.- Un gran número de especies se
capturan y exportan con fines decorativos (zoos, colecciones
particulares, acuarios público o privados, ...).
4.-
Destrucción de hábitats (incendios; contaminación; urbanización;
construcción de presas, carreteras, ...).
5.- Introducción de nuevas
especies que desbancan a las autóctonas. Ej: eucalipto, cangrejo de río
americano y black-bass (perca americana, es muy voraz) en Extremadura y otras
zonas de España.
6.- Simplificación de los
ecosistemas por la agricultura: Tanto un bosque como campo de cultivo son
ecosistemas, pero se diferencian (entre otras cosas) en su diversidad. El bosque
es más diverso que el campo de cultivo, ya que nosotros buscamos en el segundo
la mayor producción, de ahí que intentaremos erradicar del entorno todas las
especies que no nos interesan (animales o plantas: "malas hierbas",
plagas, herbívoros, ...). La agricultura y la explotación forestal basadas en monocultivos
(un único cultivo en grandes extensiones) favorece la aparición de plagas, ya
que no existirán depredadores naturales que puedan controlarla.
Para combatir las plagas
artificialmente se utilizan plaguicidas y pesticidas que suelen ser
bastantes contaminantes, además:
- No son específicos,
igual matan a la plaga que a su depredador.
- Muchos se acumulan en los
organismos que se alimentan de estos animales, que a su vez son alimento de
otros, y así hasta que aparecen en todos los organismos del ecosistema. Ej: el
DDT (diclorodifeniltricloretano; ya no se usa en Europa) ha sido detectado hasta
en la leche materna de las mujeres de zonas agrícolas.
- Pueden generar resistencia
en la especie a destruir, de manera que se vuelven ineficaces y hay que cambiar
de productos.
Como alternativa para eliminar
las plagas, de la manera más natural posible, tenemos:
- Parcelación de la superficie
cultivada, mezclando cultivos distintos. Las áreas de cultivo pueden
estar rodeados por áreas salvajes, donde pueden habitar organismos que se
alimenten de las plagas.
- Rotación de cultivos, es decir, no plantar todos los años las
mismas especies, con el fin de romper los ciclos vitales de las plagas.
- Uso de sustancias específicas
para la eliminación de la plaga que no afecten a otras especies. Entre las que
ofrecen mejores resultados están las hormonas, como las feromonas
y las hormonas del desarrollo (algunas impiden el desarrollo de
las larvas, otras lo adelantan y las larvas nacen en época desfavorable).
- Control por depredadores,
liberando en el medio de grandes cantidades de un depredador que se alimente de
la plaga. Hay que tener como precaución que el depredador no destruya
otra especies potencialmente beneficiosas.
- Control por parásitos
(es mucho más específico que el anterior). Se aprovecha la presencia en la
naturaleza de parásitos de la plaga, que se liberan en el medio. Ej: parásitos
de larvas que inoculan sus huevos
en larvas de otros insectos; conforme se desarrolla la larva de la plaga, crece
en su interior la larva parásita, devorando sus vísceras. Otro método que se utiliza bastante son las endosporas
de Bacillus turigiensis (bacteria) que son tóxicas para las larvas de
muchas mariposas pero no para otras especies (humanos, ganado, aves, etc).
3.
La alteración de la dinámica litoral
Las costas, sobre todo las de
arena, representan un sistema muy frágil. Los sedimentos que acumulan proceden
en su gran mayoría de la erosión del continente, pero las corrientes de deriva
litoral los transportan y acumulan a lo largo de las mismas. Estas zonas, por su
permeabilidad, acumulan además acuíferos subterráneos que se comunican con el
mar.
La modificación de la deriva
litoral da lugar a la erosión de las playas, bien por disminución
del aporte de sedimentos del continente, bien por interrupción de la
deriva litoral. Ej: al construir un espigón para evitar el oleaje o por la
construcción de instalaciones recreativas en zonas turísticas se interrumpe la
deriva litoral en la zona o se modifica.
Por otra parte, la sobrexplotación
de los acuíferos costeros lleva a su agotamiento y salinización.
Los acuíferos costeros tienen una particularidad destacable: su base se apoya
sobre masas de agua marina, más densa, que se infiltran en el continente
y que se mantienen a un cierto nivel por el peso de la masa de agua dulce. La
misma razón que provocaba la erosión de todo el litoral, el turismo, es la que
provoca una sobreexplotación de estos acuíferos costeros. La disminución del
agua dulce de los acuíferos próximos al mar facilita el ascenso del agua
salada, al encontrarse ésta con menor peso encima, volviéndose el acuífero
salado. Ejemplos de este tipo tenemos muchos en España: Huelva (Matalascaña,
La Antilla, ...); Málaga (Puerto Banus, Marbella, Torremolinos, Estepona,...),........
Nota:
La Ley de Costas actual es mucho más estricta que las anteriores y busca una
mayor protección de estas zonas (se considera dominio público la ribera del
mar -bajamar a pleamar-, incluyendo las playas; los 6-20 m que le siguen son de
libre tránsito; hasta los primeros 100 m se permiten usos agrícolas y de ahí,
hasta los 500 m, se puede edificar sin formar pantallas).